SIN TÌTULO

Pienso que ya no tiene caso usar este disfraz, lo boto en la calle. Tal vez sea distinto tratar de entender las respuestas que me doy si me acostumbro a no ver suelos minados a mi alrededor.

Creo fantacias en mi cabeza, sacos de mentiras que solo incrementan la carga al recoger las pequeñas cuentas que me regala el camino, tan chicas que puedo tenerlas en mi mano sin darme cuenta, justo como todo se ha hido diluyendo poco a poco, primero desapareciendo en figuras fantasmales hasta que se funden en tu palma que frota mi espalda.

He llegado a pensar que todos son momentos ya vividos, ver la vida como una suceciòn de recuerdos en la que solo tengo que dejarme vivir. Es como ahora que me mira, ¿què lo llevò a penetrar de esa manera el èxtasis entre mi mente y el mundo exterior? ¿es acaso èl, el hacedor de ideas tan importantes que lleguen a desbancar las mias?. Tal vez logre hacerme desaparecer a mi misma mientras rezo por la pèrdida de vacìo que nubla a mis lamentos. Dime entonces si podrè parar la mancha negra que se extenderà por mi cerebro, las pocas pero elocuentes (horripilantes) palpitaciones de mi respirar.

No deseo ser comida por temores profanos que solo impiden la liberaciòn de mi yo, tan solo pido poder tararear la cancion que siempre escucho en mi mente y despues escapar de los momentos absurdos y vanos que invadan mi vida, ser una misma con mis ideas y cacharlas al vuelo, no como ahora que sostengo sus debiles cuerpecitos ya sin vida, que mi reflejo mire a mis ojos sin temblar por temor a las represalias, ser lo que pienso ahora, dejarme envolver por el tinte resplandeciente de mis actos que valen tanto como antes solo que ahora me aferro a esta forma de vida como si quisiera fucionarme con ella en una eterna liberaciòn. La sensaciòn de alizar mi pelo con pequeñas flores y ¿por que no? pedir un beso antes de dormir y no tener que abandonar mi esencia, la ùnica de la que he estado convencida.

Me inclino por que el brillo del sol me lastima, pero que màs da si vivo como soy, amando el punto medio justamente de mi vida.